El niño del frente
Hay una presencia en el llanto
sublime del niño
que lo asciende lo cobija
Y lo apresura en el silencio
desde la mirada del pez
en agua salada
primigenio de su vida
el purpura de la sangre que lo asiste
un todo azul que le reserva
sortilegios y asombros
aprendizajes de soles y de espejos
un barco atrapado
en la hermandad del puerto
a la espera
del milagro de su vida.
Martha Inés Hurtado